Las combinaciones de colores en una habitación son otro gesto de arte y diseño, las cuales pueden ayudarte a vincular o acentuar toda la paleta de colores de la habitación creada por los cuadros, los textiles y los accesorios.
Incorporar dos colores de pintura en la misma habitación es muy sencillo. Para hacer que tus paredes cobren vida, sigue los consejos que te damos.
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Elige el color que más te guste
Las combinaciones contrastantes llamarán la atención de inmediato, por lo que es bueno usarlas para resaltar características únicas en una habitación, como molduras alrededor de las ventanas y puertas, o paneles elevados.
Las combinaciones mejor proporcionadas son más efectivas. Una fórmula segura es 70% para las paredes, 20% para molduras y 10% para destacar algún aspecto de la decoración.
El uso adecuado de dos colores de pintura en una habitación puede agregar una elegancia sutil. Los colores no tienen que provenir de la misma familia.
Quizás quieras resaltar una característica arquitectónica. El color también se puede usar para anclar un mueble grande, como una cama en un dormitorio. También puedes dale un poco de amor a las molduras y puertas.
El techo a menudo se olvida. Este puede ser un gran lugar para un color de acento. Un tono más brillante expandirá el espacio.
La teoría del color sugiere usar un tinte como color dominante en la habitación, un color tonificado como color secundario, y el color de acento es el más vibrante y puro de los tres. Sin embargo, las reglas están destinadas a romperse.
Si sientes que una habitación necesita más de cierto tono, entonces sigue tu intuición.
Piense en las diferentes combinaciones
Los colores más claros darán la ilusión de espacio y los colores más oscuros harán que la habitación se sienta más pequeña y acogedora. El uso de colores monocromáticos crea un efecto envolvente y tenue.
Si buscas una opción neutra, pinta la mitad inferior del la pared de un gris oscuro y la mitad superior de un tono más frío. Para una combinación equilibrada y audaz, usa rojo cereza junto con un tono más suave y delicado.
Intenta jugar con lados opuestos de la rueda de colores, como azules y naranjas, para obtener una combinación inesperada. Los colores uno junto a otro en la rueda de colores, como verdes y azules o rojos y naranjas, crearán un efecto enriquecedor.
Al seleccionar dos colores para una habitación, es importante elegir uno que sea blanco o de un color más neutro para no competir o pelear con el color de acento.
Las paredes no tienen que estar necesariamente divididas por la mitad. Una división desigual puede agregar aún más dimensión. Al final sigue a tu corazón y elige las combinaciones que más se adapten a tu estilo de vida y a tu personalidad.
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